Sistema de citas
En un abrir y cerrar de ojos
Todas traemos permanentemente cargando nuestra niña interior, para algunas es ligera, para otras, pesa toneladas, según nuestras vivencias y entorno familiar. Pero todas tenemos raspones, heridas y cicatrices emocionales que merecen los cuidados y atención necesarios para que sanen y nos permitan vivir con una mejor #autoestima y mucho más ligeras.
Seguramente, en algún momento, te has preguntado la razón por la que tuviste tal reacción o porque te provoco tanto enojo esa circunstancia o miedo, angustia, etc. y muchas veces no sabemos de dónde vienen esas emociones que se disparan sin nuestro permiso, pues es culpa de nuestra #niñainterior.
Tu niña trae consigo todos los traumas, dolores, complejos y heridas de tu pasado, nuestro patrón emocional positivo y negativo y al ponernos en contacto con ella, la estamos ayudando a que se recupere, sane y nos deje de causar problemas en nuestra vida adulta.
Es muy triste encontrarnos con personas que dicen “así soy ¿y que? ya ¡estoy muy grande para cambiar!”, ya que todos tenemos la capacidad y responsabilidad de evolucionar y convertirnos en mejores versiones de nosotros mismos y ayuda mucho sanar las heridas emocionales que tuvimos en el pasado.
Nuestros padres hicieron lo que consideraron adecuado para educarnos en ese momento, con las herramientas que tenían, pero eso no quiere decir que hayan utilizado el mejor método o que tengamos que repetir el patrón con nuestros hijos también.
Estos son algunas de las heridas emocionales mas comunes en nuestras niñas internas:
1- El miedo a ser abandonadas
Esta herida cuando somos adultas se traduce en miedo a la soledad y la constante necesidad de construir barreras físicas con los que nos rodean por temor a ser lastimadas nuevamente y lejos de atraer a personas que nos amen, provocamos que se alejen.
Para que cicatricemos tenemos que crear lazos sólidos y estables con las personas que nos rodean, hablar de nuestros temores y constantemente repetirnos que somos adultas y fuertes para sobrellevar las pérdidas y ausencias que suceden en nuestra vida.
2- El miedo al rechazo
Las niñas heridas con el rechazo se convierten en adultas que no sienten merecedoras al afecto y comprensión de los demás, se rechazan ellas mismas, autosaboteandose constantemente.
Si es tu caso, para sanarte, es muy importante que trabajes en tu autoestima, que dejes de descalificarte y empieces a conocerte, amarte, perdonarte y estar en paz contigo misma. ¡Arriesgate! Toma decisiones por ti y no te tomes personal lo que hacen los demás.
3- La humillación
Aquellas que sufrieron de niñas críticas, burlas y la desaprobación de las personas que amamos, casi siempre se convierten en mujeres inseguras y dependientes, algunas otras (como un mecanismo de defensa) se vuelven tiranas y egoístas como un escudo protector ante el miedo a ser lastimadas otra vez.
Hay que trabajar mucho en convertirnos en mujeres independientes y libres, comprender la raíz de nuestros temores y darle importancia a nuestras necesidades, reacomodar las prioridades, poniéndonos a nosotros al principio de la lista.
Existen muchísimos tipos y tamaños de heridas en el alma y en la mayoría de los casos casos, nos acostumbramos a vivir con ellas “ya ni las notamos” pero andamos permanentemente limpiando los platos rotos de las reacciones, actitudes y berrinches que nuestra niña interior tiene y en definitiva (creo yo) si podemos ayudarle a sanar, cicatrizar y a estar en paz se reflejara en nuestro bienestar y en el de las personas que nos rodean.
Este 30 de Abril no solo celebremos #eldiadelniño, hagamos conciencia de nuestra niña interna, apapachala, cuidala, quierela, tanto como festejas a tus hijos. !!!Dale un gusto y llevala a #EyeDesign!!! ¡Que se sienta linda! Checa en la pagina http://www.eyedesign.mx las muchisimas promociones, estan buenisimas y seguro hay una sucursal cerca de ti.
No te deseo un “Feliz día de niño”, te deseo una niña interior feliz y plena.
¡Nos vemos!
¿En que te podemos ayudar?